El Superintendente de Insolvencia y Reemprendimiento, Hugo Sánchez Ramírez, destacó la importancia de la Asesoría Económica de Insolvencia como una herramienta fundamental para las microempresas y las pequeñas y medianas empresas (MIPEs) que enfrentan crisis financieras. En una reciente declaración con motivo del Día Internacional de las MIPEs, Sánchez subrayó que estas organizaciones son esenciales para la economía del país, y que deben contar con el respaldo adecuado para sortear dificultades. A este efecto, recordó la promulgación de la Ley N.º 21.563 en agosto de 2023, que introdujo procedimientos simplificados destinados a facilitar la reestructuración de empresas en problemas.
Uno de los procedimientos más destacados es la Reorganización Simplificada, que está diseñada para aquellas empresas que, a pesar de su situación delicada, aún tienen viabilidad. Este proceso judicial permite a los emprendedores alcanzar acuerdos de pago con sus acreedores, proporcionando un marco legal menos burocrático para reestructurar operaciones y mejorar su situación financiera. Durante este proceso, un veedor especializado asiste a los empresarios en la formulación de propuestas de pago, lo que representa un gran avance en la forma de gestionar las crisis.
Además, la normativa incluye la Protección Financiera Concursal, que brinda un período inicial de 40 días en el que no se pueden iniciar juicios en contra de la empresa. Este resguardo legal, que puede ser prorrogado en dos ocasiones, permite que el emprendedor enfoque sus esfuerzos en la negociación con sus acreedores, llevando a cabo un acuerdo de pago sin la presión de embargos o demandas. Esta tranquilidad temporal es crucial para que las empresas puedan desarrollar estrategias efectivas y sostenibles para enfrentar sus desafíos financieros.
Por otro lado, la Liquidación Simplificada se presenta como un último recurso para aquellas empresas que ya no pueden continuar operando. A través de este procedimiento, el emprendedor entrega sus bienes a un liquidador, quien se encarga de venderlos para saldar deudas con los acreedores. Si bien se considera que la Liquidación Simplificada debe ser el último recurso, el Superintendente destacó que este proceso es más rápido y con menos costos, lo que permite a los emprendedores cerrar sus ciclos económicos de manera ordenada.
Finalmente, el Superintendente hizo un llamado a los emprendedores a actuar de manera preventiva al enfrentarse a cualquier signo de insolvencia. «Es crucial no esperar a que la situación se vuelva insostenible», afirmó. Invitó a los empresarios a acercarse a la Superir, a informarse sobre los procedimientos disponibles y a solicitar la ayuda necesaria para enfrentar sus crisis económicas. La asesoría y apoyo temprano pueden ser decisivos para garantizar la continuidad y sostenibilidad de las MIPEs en el país.