
Cualquier análisis que se realice de la industria del fitness en los próximos años debe considerar los efectos de la pandemia de covid-19.
En los peores meses de la pandemia la industria del fitness fue una de las más afectadas. Los cierres obligatorios y de forma indefinida, de gimnasios, centros de entrenamiento junto con restaurantes, bares y otras empresas de servicios provocó pérdidas devastadoras tanto de ingresos como de recursos y de personal valioso.
Ahora que la industria se ha ido recuperando paulatinamente, los propietarios de los gimnasios se están adaptando a los cambios fundamentales provocados por la pandemia y los nuevos hábitos de los clientes en la llamada nueva normalidad.
La preferencia por los gimnasios
Cuando por fin empezaron a desaparecer las restricciones y los gimnasios pudieron abrir todos sus espacios se observó un aumento en la afluencia de clientes, las personas que se habían mantenido activas durante la pandemia, ahora preferían regresar de nuevo a los gimnasios. Incluso aumentaron las búsquedas de “gimnasios cerca de mi” para el periodo de verano de 2021.
Tanto las grandes cadenas como los gimnasios locales tuvieron un crecimiento notable. A pesar de que tuvieron que ajustar los aforos de acuerdo a las regulaciones que propuso cada gobierno, o implementar algún software para centro deportivo que les permitiera controlar las citas de los clientes, lo cierto es que las personas volvieron a inscribirse en los gimnasios.
Quizás unas de las razones que impulsaron estos cambios fueron:
La maduración de la Generación Z
El grupo más grande de clientes de los gimnasios locales tiene entre 21 y 30 años. Cada vez más miembros de la generación Z están entrando en este grupo de personas, quienes criados bajo la influencia de las redes sociales son personas mucho más preocupadas por su físico y por llevar una vida mucho más saludable. La generación Z está compuesta por individuos nacidos entre 1997 y 2012, por lo que el más joven tiene ahora 9 o 10 años y el mayor 24 o 25.
Hacer ejercicio en casa es una moda de temporada
Aparte de los cierres por confinamiento, hacer ejercicio en casa está vinculado a las resoluciones de año nuevo u otros eventos específicos como bodas o cumpleaños. Y la realidad es que al final las ventas de garage y los sitios de reventa están llenos de equipos fitness que han tenido muy poco uso.
Ahora con la desaparición de las restricciones y la reapertura de los gimnasios, el mercado de máquinas para hacer ejercicio en el hogar dejó de ser una amenaza para las membresías de los gimnasios.
Las personas necesitan a otras personas
El aislamiento tuvo severas consecuencias psicológicas en los últimos dos años. Para muchos el sentimiento de soledad resultó en efectos emocionales y físicos adversos.
Por lo que diversas investigaciones han demostrado que realizar actividades grupales como ir al gimnasio son excelentes motivadores sociales que ofrecen interacción social entre los clientes y el personal, otorgan un sentido de pertenencia y promueven el comportamiento cívico en ambientes controlados.
La tecnología volvió a ofrecer la solución
En esta ocasión muchos gimnasios optaron por algún servicio online de agenda como AgendaPro. Este software permite a los clientes organizar su tiempo para ir al gimnasio sin preocuparse por los contagios, ya que la aplicación se asegura con cumplir con los reglamentos de aforo establecido. De este modo los gimnasios evitan multas y las personas pueden ir más seguras a hacer ejercicio.