El próximo 26 de noviembre de 2023, a las 19:00 horas, el escritor Joaquín Miranda Puentes presentará su libro «Psicosis lúcida» en el Espacio Literario de Ñuñoa, ubicado en Jorge Washington 116. Este relato íntimo y conmovedor narra la experiencia del autor, quien a los 15 años se vio obligado a ser internado en una clínica psiquiátrica. La obra busca no solo contar su historia personal, sino también abrir un espacio de reflexión sobre las problemáticas que enfrentan quienes viven con trastornos mentales en una sociedad que frecuentemente los estigmatiza, ignorando su sufrimiento y deshumanizando sus vivencias. La presentación contará con la participación de las presentadoras Amanda Marton y Ariana de Sousa-García, quienes aportarán su visión sobre esta importante temática.
En «Psicosis lúcida», Miranda describe los aterradores momentos tras su sedación, donde se despierta en un entorno ajeno, rodeado de colores fríos y una tele de antaño que, de alguna manera, le brinda un sentido de compañía. Sin embargo, el autor no oculta su miedo y la sensación de traición que siente al ser ingresado sin un diagnóstico claro. Esta experiencia, que él mismo califica de deshumanizadora, refleja el desafío que enfrentan muchos adolescentes en tratamientos psiquiátricos: una sucesión de medicamentos, controles rigurosos y un sistema que muchas veces ignora la esencia del ser humano que está tras la etiqueta de «enfermedad mental».
Miranda hace un llamado a la reflexión no solo sobre su vivencia personal, sino sobre cómo la sociedad y el sistema de salud abordan la salud mental. En sus propias palabras, propone una revisión crítica del paradigma psiquiátrico contemporáneo, cuestionando la utilización del mismo término «enfermedades» para referirse a problemas psicológicos, un tema que está marcando el rumbo de un debate que necesita ser abordado con urgencia y respeto. Al compartir su historia, invita a los lectores a reconsiderar sus percepciones y a ser más empáticos con aquellos que sufren y que, a menudo, son invisibilizados por un sistema que prioriza el diagnóstico sobre la persona.
La obra de Miranda, que combina elementos autobiográficos, datos médicos y reflexiones personales, es un claro ejemplo de cómo la literatura puede ser una herramienta poderosa para abordar temas difíciles de la vida. A través de anécdotas que van desde su vida social hasta sus experiencias con otros pacientes, el autor logra un balance entre la tristeza y la ternura, mostrando que la melancolía puede coexistir con momentos de esperanza. Estos relatos no solo son sanadores para él, sino que también abren un diálogo necesario para quienes se ven obligados a lidiar con etiquetas psiquiátricas y el impacto emocional que estas conllevan.
Finalmente, Joaquín Miranda apunta que su libro no debe ser visto como un caso aislado, sino como la punta del iceberg de una problemática mucho más amplia que afecta a miles de personas. Consciente de que el silencio muchas veces rodea a los problemas de salud mental, invita a la sociedad a dejar de lado los tabúes y a asumir una postura más abierta y comprensiva. El autor, que tiene una vasta trayectoria académica en el ámbito de las Letras y la Lingüística, se convierte en portavoz de una generación que ha sido marginada por su condición y que, a través de su escritura, busca ser escuchada y finalmente comprendida.
